Todo el Universo está dentro de ti.
Suena al típico bla bla de New age, ¿verdad?. Y cuando uno suelta esta frase te miran raro o piensan que se te ha ido la cabeza. Lo mejor de todo, es que tú eres lo que hace que el Universo se expanda, por tanto, eres el Universo.
Pocas personas pueden hablar libremente sobre consciencia y la diferente vida del Universo, sobre otras vidas, vidas extraterrestres o extra dimensionales. Todo eso existe, como el sol y la luna. Lo que es raro, es que no se pueda hablar libremente por la demasiada ignorancia que nos rodea y que tampoco haya un concepto correcto sobre la «espiritualidad».
No es del todo culpa de la gente, sino de aquellos que «mandan y educan» que tapan lo que hay ahí fuera, encubriendo la tecnología desarrollada de los últimos 60 años, dejando que la ciencia siga adelante y no actualizando la información, etc etc etc
¿Y los que hablan sabiendo lo que dicen? o les toman por locos o les matan.
Cada vez más salen documentales sobre la «hipotética verdad», está lleno de programas en Gaia tv, y los blogs abundan para dar crédito a nuestra verdad, porque tenemos derecho a conocer nuestro potencial y lo que somos.
Hay muchas técnicas para salir del cuerpo y viajar por ahí donde y como quieras, meditaciones con ondas binaurales, científicos que se dedican a explorar y a contarnos las novedades y errores que habíamos creído años. Todo está a la mano para que el ser humano despierte de una vez, pero hay algo en la masa colectiva que tiende a no querer creer y saber, manteniéndose en la ignorancia y limitación.
Somos unos seres cósmicos impresionantes, llenos de luz y potencial. Si desde pequeños nos enseñaran a desarrollar nuestras habilidades naturales que hoy llamamos estúpidamente «superpoderes», a reconocer que somos más que un cuerpo físico, que podemos sanarnos solos, e infinidad de otras cosas, este mundo sería un paraíso, porque nadie dejaría que le engañasen y todos nos ayudaríamos a desarrollarnos. Viviríamos en paz, no es una utopía.
A veces es frustrante no poder gritarlo al mundo.
Es frustrante saber cosas y que el mundo no esté preparado, pero en verdad, si lo está. Solo que los mismos humanos no quieren que las personas sepan, nosotros mismos somos la limitación para la evolución porque dejamos que así sea. Vivimos en un efímero bienestar creado para que no te des cuenta de tu poder. Las mismas personas no saben reconocer la verdad porque su intuición es baja o prácticamente desconectada por creencias y prejuicios (y qué decir de tanto móvil y dependencia de la tecnología).
Todos llevamos dentro la verdad de lo que somos y el conocimiento cósmico. Ya no miramos las estrellas, no las sabemos reconocer, decimos cosas que ya no existen porque la ciencia descubrió miles de cosas más y nadie nos lo cuenta porque prefieren mantener los libros y universidades obsoletas, las noticias….. etc
Se prefiere mantener a la humanidad sintiendo que estamos divididos (por política, cultura, religión, hasta en el deporte…) y que todo es limitado, el típico «no se puede».
Pues va a ser que no. Nadie está dividido ni separado, ni tu vida actual lo está de tu consciencia y el Universo. Todos somos exactamente lo mismo y desde fuera hay mucho apoyo.
Como decía Jesús (que después de 2 mil años seguimos sin reconocer su mensaje) en San Marcos 4, 1-20:
«A vosotros se os ha dado el misterio del reino de Dios; en cambio, a los de fuera todo se les presenta en parábolas, para que “por más que miren, no vean, por más que oigan, no entiendan, no sea que se conviertan y sean perdonados”». Y añadió: «¿No entendéis esta parábola? ¿Pues cómo vais a conocer todas las demás? El sembrador siembra la palabra. Hay unos que están al borde del camino donde se siembra la palabra; pero en cuanto la escuchan, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos. Hay otros que reciben la semilla como terreno pedregoso; son los que al escuchar la palabra enseguida la acogen con alegría, pero no tienen raíces, son inconstantes, y cuando viene una dificultad o persecución por la palabra, enseguida sucumben. Hay otros que reciben la semilla entre abrojos; éstos son los que escuchan la palabra, pero los afanes de la vida, la seducción de las riquezas y el deseo de todo lo demás los invaden, ahogan la palabra, y se queda estéril. Los otros son los que reciben la semilla en tierra buena; escuchan la palabra, la aceptan y dan una cosecha del treinta o de sesenta o del ciento por uno».
Libre albedrío.
Tú eliges qué quieres creer, pero la intuición se creó por algo. Cuanto más te conoces, más libre eres y más ves la Verdad de lo que somos. ¿No crees que eso es tener libertad absoluta? Entenderías la ilusión en la que vivimos, y no es la peli Matrix, es la realidad. Somos co-creadores, porque estamos hechos de la llama Divina. Sí, eres Dios encarnado en uno de sus tantos aspectos de formas de vida.
Cuando seas consciente entre la diferencia de creer y saber, todo cambia. ¡Prueba!
