Hoy es el día de Navidad que tantos celebran sin saber qué significa en su origen.
Nada que ver con el nacimiento de Jesús! La mejor descripción simple y contundente que he leído hasta ahora (y así no me repito) es la de Matías de Stefano:
Todos los maestros eligieron en su camino renacer este día, y hay renaceres más importantes que otros, aunque no dejan de ser fractales entre sí. El 25 de Diciembre, el mundo cristiano celebra el nacimiento de Jesucristo, sin embargo, la razón por la que lo hace este día es muy diferente. El año terrestre está dividido en 12 meses solares que se ordenan en 4 periodos generales llamados “estaciones”. Dos de ellas se conocen como Equinoccios (de Primavera y Otoño), momentos en que el eje de la Tierra se encuentra equilibrado, y ese y oeste se alinean a igual medida, por ello, “igual”, es decir “aequus”, origen de la palabra “equidad”, y así “equinoccio”. Los otros dos, representan los momentos en que el Sol se etiene en el horizonte y permanece quieto, detenido, estable por tres días antes de volver a moverse. La percepción de este movimiento se refiere a que el sol va asomándose en cada amanecer unos pocos grados hacia el sur o hacia el norte cada día. Cuando llega a su máximo de desplazamiento en dichos extremos según nuestro punto de vista, el sol parece detenerse por unos días antes de volver, regresar. Por ello, “Sol Estable”, da lugar a “Solsticio” (Verano e Invierno). Estas 4 estaciones son la Cruz, la crucifixión del Sol, pues los 4 hacen referencia a posiciones del sol en el Cielo. Los 12 extremos de una esfera, los portales del dodecaedro, hablan de las 12 espinas de la corona divina, clavado en un eje fijo entre Norte y Sur. El 21 de Diciembre es el Solsticio de Invierno para el hemisferio norte, lo cual ha marcado en las culturas de Norteamérica, Europa, parte de África y Asia, la idea de que ese día el sol ha llegado a su máximo del sur, alejándose, viviendo el día más corto, pero anunciando así el retorno de los días largos. Durante 3 días permanece quieto, en eje, en la cruz, y renace a la vida reiniciando su trayecto hacia la luz el cuarto día, el 25 de Diciembre. Así, para todas las culturas nórdicas, estas fechas representan la celebración del inicio del nuevo año, donde se celebra a todos los dioses solares, pues su brillo resurge.
Os voy a contar lo que recibo desde la sabiduría de Prisma (un grupo de 256 consciencias pertenecientes a una inteligencia fuera de este Universo).
Hoy es un día de renacimiento, lo que significa que es un día para integrar lo vivido y aprendido del año desde la introspección, para empezar el nuevo ciclo (año terrestre) desde otra perspectiva más alta.
Esto lleva a que tu percepción del mundo y tu vida cambie para desarrollar tu potencial que te llevará a completar tu misión de vida.
Piensa en tus prioridades. ¿Cuáles tienen que cambiar para que sientas que estás en el camino correcto?
En el momento en que cambias y reorganizas tus prioridades, la percepción de tu realidad cambia hacia donde tu corazón está enfocado.
Renacer significa vivir en coherencia con tu verdad
Saber que tu vida podría ser mejor y no ponerte en ello, es como dejar que las mejores oportunidades pasen de largo y no hacer nada por vivirlas. La intención es el primer paso. Te saca de donde estás .
Vivir en coherencia significa que lo que piensas, crees, dices y haces es lo mismo. No solemos estar acostumbrados porque nuestro sistema de creencias lo impide.
Pero es el propósito de despertar y renacer es ser libre de SER y poner en práctica lo aprendido desde la propia experiencia. Así de simple.
¿Estás listo? ¿Qué te falta por poner en orden? ¿Eres libre de seguir tu propia vida sin miedo al qué pasará o qué dirán? ¿Crees y confías en ti suficientemente? ¿Estás listo para celebrar tu Libertad de Ser porque ya tienes la experiencia para explorar más allá de lo conocido?
La luz que emanas cuando eres libre de ser es la equivalente al sol que celebramos hoy. Luz es información. Tu luz es presencia. Este año que dejamos ha traído mucha introspección para integrar sabiduría y dar pasos de gigante en tu desarrollo espiritual.
Usa estos días para limpiar e integrar lo que verdaderamente eres y te importa. Deja fuera lo que te ha llevado a desconectarte de tu verdad. Cambia hábitos, creencias, patrones de pensamientos, etc… todo y todos a tu alrededor existen para que cambies, recuérdalo!
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