La realización

Todos los días me llegan personas con problemas o bloqueos de realización, y todas las veces terminamos hablando de su Verdad. Normalmente, pocas personas viven conscientes de saber quienes son real-mente. La definición de realización que tenemos es prácticamente egoica, desde la identificación de un personaje, profesión o estatus social. Eso no es lo que verdaderamente significa, y menos para el alma.

Crecemos creyendo que realizarnos es ser exitoso, ser algo para la sociedad, para la familia, tener algo, llegara a ser alguien para …. menos para lo que en realidad somos.

La realización es convertirte en tu Verdad, sin etiquetas, sin identificaciones de roles que no te pertenecen, más bien tergiversan tu camino, llegar a ser transparente, auténtico, genuino, desarrollando un potencial que sólo tú tienes. Algunos dirían que eres un loco, que te inventas un oficio que no existe y eso no te «va a dar de comer».

La sociedad nos costriñe a estudiar carreras que no nos calzan exactamente y al final terminamos por adaptarnos a unos estudios que nos llevan a olvidarnos de nuestro potencial y hay que volver a «ser» cuando un día sientes que nada te llena. Antes o después, la gran mayoría de los problemas de depresión, ansiedad y crisis vienen porque sentimos que no nos hemos «realizado» en la vida. Nos dedicamos a ser madres, padres, abogados, profesores, y dejamos en la sombra SER nosotros mismos.

La realización es sacar la transparencia de tu verdadero YO SOY. La palabra «realización» proviene del latín «realis» que significa «real» o «relativo a las cosas» y el sufijo «-ción» que se utiliza para formar sustantivos abstractos a partir de verbos o adjetivos en español. «Realización» se refiere al acto o proceso de hacer realidad algo, de llevarlo a cabo o concretarlo.

O sea, que la definición desde el alma y la correcta frecuencia sería llegar a ser la verdad que soy desde lo que elijo experimentar en la vida para crear una nueva y mejor versión de mi esencia. Lo que significa que nada me va a llenar salvo lo que me hace feliz, y no es nada material o una identidad «falseta» o máscara.

Entonces estaré realizad@ cuando me sienta satisfech@ de mi vida, de lo que he hecho y cómo lo he hecho. Porque he construido mi vida en base a las elecciones que he decidido, en lo que he aprendido de mí y por la libertad de ser exactamente como soy desde mi naturaleza y transparencia.

Realizarse lo podemos ver también como levantar la propia verdad, mi ser REAL. La palabra «izar» proviene del latín «isar», que a su vez se deriva del griego clásico «izein». Originalmente, «izar» se usaba para referirse a la acción de alzar o levantar algo pesado o un objeto mediante una cuerda o una polea. Entonces, real-izarse  a uno mismo, es el proceso de desarrollar y alcanzar el potencial máximo de uno mismo en todas las áreas pero desde su verdadero potencial y magia.

La etimología de «realizarse uno mismo» se basa en la misma raíz latina «realis» que significa «real» o «relativo a las cosas», pero también incorpora el pronombre reflexivo «se» que indica que la acción es realizada por la propia persona sobre sí misma. En conjunto, «realizarse uno mismo» implica la idea de hacerse real o completo en términos de alcanzar un estado óptimo de desarrollo y plenitud en la vida personal y emocional pero no desde la expectativa de la sociedad o la cultura de donde venimos, sino desde el alma que experimenta una encarnación nueva de aprendizaje para brillar su luz, para surgir en su pleno potencial.

Ser consciente desde pronto en la vida de saberse realizar desde la propia transparencia, significa ser muy fuerte. Porque siempre vamos a sentir una presión social, cultural o familiar encima para que seas la expectativa «perfecta» para otros menos para ti. Las personas que llegan a una cierta edad en crisis, la mayoría de las veces, es por falta de realización personal. A mi consulta vienen desde jueces, médicos ,personas muy exitosas de carrera, o simplemente que no saben qué hacer en su vida, pero vacías. En algunos casos, queriendo cambiar de vida radicalmente porque saben que su felicidad está por otro camino y no saben cómo cambiar por «el qué dirán», miedos  a perder y la escasez.

Hay que entender que realizarse es respetarse a sí mismo, ser auténtico, tener amor propio, dignidad, tener autoridad (es decir, ser autor de la propia vida y elecciones), es seguir el camino del sueño sagrado interior. Muchas veces necesitamos cambiar y cambiar para construir la vida que queremos y nos llena. Yo empecé como escenógrafa para hacer teatro y tengo detrás 4 carreras/profesiones y me estoy inventando la 5.

No he hecho nada de lo que tenía previsto cuando tenía 25 años. Y supongo que acabaré el año haciendo algo que ahora ni sé que existe! Para muchas personas SER auténtico y genuino es tener mucho valor para imponerse ante la sociedad, porque vas a recibir críticas, sobre todo de tu familia. En la mía «creen» que estoy loca o que tengo asperger. En fin, con tal de saber uno mismo lo que es, no hay problema. La felicidad es lo importante, sentirse plen@ y realizad@. Al final, te amarán igual y quien abra su corazón entenderá sin filtros tu esencia, y en mi familia ya hay muchos que entendieron! jajajajaja

Realizarse espiritualmente no tiene nada que ver con «ser bueno» o tener compasión de alguien, es ser fiel a la esencia de uno mismo y construirse según aquello que te hace ser mejor y feliz.

Haz un pequeño ejercicio para saber qué tan satisfech@ estás de tu vida. Quita logros profesionales de etiqueta, social, carrera o materiales. Quédate con lo que has logrado por tus decisiones honestas para crecer en transparencia, para ser tú. Incluye también los «fracasos» o crisis que te han llevado a cambiar y decidir ser, porque eso si es curriculum vitae. Si ves que falta algo, ya sabes cuál es el camino a seguir.

Una persona realizada ha logrado crear sus sueños, dejando un legado genuino, una huella al mundo, pero sobre todo, para su propio espíritu. Seguir el sueño sagrado es la razón de encarnar. Mientras que recibes del mundo, das y aportas a los demás la energía de que todo es posible cuando en tu realidad, eres transparente y fiel a tu esencia. La realización, es un proceso de autoconocimiento y amor propio que dura toda la vida.