Se requiere de una fuerza de voluntad enorme para buscar esa pieza y sanarla. No es fácil.
En algún momento de la vida hemos pasado por situaciones extremas de dolor, traumas, estados de shock, experiencias muy dolorosas que han quebrado nuestro corazón. Literalmente, parte de nuestra alma se fragmenta, se quiebra, se despega de nuestra realidad y de alguna manera se queda congelada en el espacio y tiempo para protegerse.
Desde ese momento, la emoción que vivimos queda cristalizada como una huella en nuestro sistema energético, generando que las líneas del tiempo cambien para nosotros.
Cuanto más pasa el tiempo y evitamos sanar esa parte importante de nosotros, más se entierra bajo otras emociones que te alejan más del origen y se dificulta reconocer la base del problema.
Cuando estamos con depresión, ansiedad, sensación de estar perdido, con estrés profundo, con reacciones de desesperación, cuando todo parece que te va mal, es porque la vida llama a que recuperes fragmentos rotos y te puedas alinear en tu destino, en tu mejor versión.
Esta meditación está programada con sanación para que puedas recuperar una parte de ti que te espera para ser reintegrada en tu corazón.
Tómate el tiempo de sentir cuál es el dolor más profundo que tienes. Sin prisas.
Siente si de verdad estás dispuesto a que lleguen cambios radicales a tu vida, porque al integrar una parte de ti pura, cambia la frecuencia de tu ser, por tanto, situaciones y personas que dejarán de estar en tu vida.
La vida te ofrece poder llegar a recuperar fragmentos del alma que pueden estar en partes muy remotas del universo, depende de cuando y por qué se rompieron. No importa, siempre vuelven cuando te abres a recibirlas para tomar consciencia de tu experiencia vital.
La vida te ofrece volver a vivir con esa pureza, con la integridad de tu naturaleza, pero desde la sabiduría. Es una segunda oportunidad de volver al raíl evolutivo y experimentar lo que verdaderamente está ahí para ti.
Siente tu dolor. Identifica esa huella.
La meditación es un viaje al centro de tu alma, al jardín donde se encuentra ese fragmento protegido esperando ser recuperado. Si aún no es tu momento, no completarás el viaje, porque vas a volver a ver imágenes de cómo pasó todo. Y no siempre te hará sentido lógico.
Déjate llevar, recibe sabiduría, purifica tu dolor.
Repite las veces que quieras la meditación, porque tenemos muchos fragmentos perdidos que recuperar.
Disfruta, y feliz sanación!
Versión en español
Terapias Viaje hacia el centro del alma
Sanar es un viaje de autoconocimiento y empoderamiento. En este viaje podrás empezar a comprender cómo despertar la matriz energética que envuelve el cuerpo físico para crear la salud y prevenir enfermedades, activando los genes de la longevidad y reparación celular dentro de cada célula.
Vas a limpiar heridas y huellas energéticas que influyen en tu vida y decisiones, memorias en tu genética que llevan información de tus ancestros que no necesitas, vas a eliminar creencias y programaciones de tu sombra y más formas de bloqueos energéticos. Todo este proceso lleva a que vivas en la plenitud y prosperidad de tu sueño sagrado, comprendiendo el camino para que escribas tu propia historia.
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Gracias por esta hermosa y sanadora meditación. Bendiciones
Gracias!