Sapientia Conversi Quinquanginta

Del latín, La sabiduría de cumplir cincuenta.

El 5 de sept cumplí los 50, medio siglo de vida llena de experiencias tanto de luz como de sombras profundas. Mirando hacia atrás veo un plan divino perfecto, y cuanto más recuerdo y sano, más tengo consciencia que está tejido desde mi voluntad en varios planos de existencia y una inteligencia divina que tiene un enfoque de expansión para el universo.

Hace tiempo, algo recibí y vi en una meditación que escribí en este artículo y durante el temazcal, que también conté mi experiencia en este artículo, viajé al futuro viendo como la raza humana era la perfección de una raza espiritual maravillosa que se expandía en todo el Universo. Pues a mis 50 años puedo ver una espiral de mi tiempo- espacio vital que sigue una misión espiritual que es expandir la consciencia. Me ha llevado mucho trabajo de sanación personal entenderlo, recordarlo y trazarlo, hoy lo comparto en mi trabajo de terapeuta a través de mi método Procesos evolutivos y el viaje al centro del alma, para que cada persona que quiera saber, pueda acceder a su viaje de sanación en transparencia.

En este viaje de 50 años he experimentado una vida difícil, llena de lecciones muy duras, he vivido en varios países y tengo varias carreras. Todo esto me ha servido para terminar de sanar muchas vidas pasadas, en las que no creía por la educación católica que recibí, también es parte de romper creencias y memorias que llevan a recordar el conocimiento ancestral y de romper votos y pactos. He experimentado el amor profundo, el corazón roto, la noche oscura del alma, grandes éxitos y fracasos, la soledad, la dureza de empezar de cero una vida y la de surgir en otra exitosamente gracias a la perseverancia. Pero lo que en cada periodo me ha sacado hacia adelante ha sido la honestidad, respeto por mi vida y pureza con la que he hecho todas y cada una de mis acciones y elecciones.

Hoy por hoy, he aprendido que no se puede vivir en la sombra de nadie, que el talento antes o después surge, aunque traten de pisarte, anularte y sacarte de donde sea, si no es a través de una carrera se abre otra. Y esto es porque somos seres multidimensionales que tenemos memorias de otras vidas llenas de recursos y potencial que necesitan ser expresados en los distintos aspectos de nuestras encarnaciones.

Todo lo que pasa en nuestra vida es un reflejo de algo que necesita ser sanado, expresado, liberado y desarrollado más allá de lo conocido por el alma. Llega un momento en nuestra existencia, donde el recorrido de sanación llega a su fin para que el alma pueda adentrarse en un nuevo estadio de consciencia para ser creador de aquello que ha trabajado y experimentado durante varias vidas. Hay mucha información que se desconoce en la educación del día a día. Nos han enseñado a olvidarnos de todo, hasta de lo más importante: quién eres realmente. Y la gente sigue viviendo alimentando la identidad de un ego efímero, creyendo ser alguien basado en etiquetas e ideas de moda, carreras, ilusiones que en el fondo, no valen nada para la razón existencial por la cual hemos encarnado.

Agradezco a mi familia en la que he nacido, tuve unos padres que nos enseñaron los valores de la vida impecablemente. Vengo de dos ramas familiares opuestas, de raza, cultura y educación. Esto no es casualidad, ya que desde otras vidas necesito sanar mis ancestros españoles y su karma, como la de mis ancestros mexicanos. Sangres que tienen que hacer las paces para purificar sabiduría y vidas. Mi cultura europea, (viví en España, Italia y Alemania), me dio una base en el arte y música que me ha hecho comprender el valor de la medicina del sonido ancestral. Este camino a través de la ópera me enseñó a apreciar la sencillez del sonido que viene del alma pero que se tergiversa por la soberbia del ego y el poder sanador se apaga, cuando no está alineado a su intención pura de catarsis. He conocido un sinfín de artistas muy exitosos en sus carreras, he vivido sumergida de historia y arte, base y cuna de nuestra cultura. Y todo me ha llevado a apreciar la sencillez del origen de la vida humana.

Vivir en Ecuador me abrió a comprender la importancia de estar conectados a la Madre Tierra y a recuperar la medicina sagrada ancestral. También entendí que cada cultura tiene su belleza y autenticidad, importantísimo es desarrollarla y honrarla. Cuando una cultura quiere copiar a otra y rechaza la suya por sentirse inferior, es un karma que necesita ser sanado y honrado, porque detrás, hay una luz que necesita el mundo para seguir expandiendo la genialidad y espiritualidad humana. La dulzura del canto que llevan en sus corazones la gente de Ecuador, lleva medicina y sabiduría del alma, y se me parte el alma cuando les veo querer ser lo que no son. En la sencillez está la semilla de la verdad y el primer mundo necesita recuperarla.

He visto y entendido, que ahora las semillas que necesita el mundo vienen del oeste americano para esparcirlas en el este europeo. Espero que este mensaje vaya llegando a los corazones y mentes de aquellos que llevan en su interior esta sabiduría. Agradezco a mi familia ecuatoriana, amigos y pacientes que han compartido 15 años conmigo y aquí, he recordado mi medicina y he puesto en práctica libremente, así como la he desarrollado ampliamente. También a todos mis amigos, pacientes y compañeros de aventuras energéticas en España que me acompañaron en mis primeros años de entrenamiento y aún hoy siguen a mi lado. Y por supuesto, a aquellos amigos, compañeros del Monroe y pacientes en US y en el mundo a los que comparto mi mejor versión de lo que soy.

Ahora empiezo un ciclo de claridad, sabiduría, libertad de ser y medicina del alma, para empezar a compartirlo desde otros aspectos más refinados que me permiten surgir como mi mejor versión, completándome con la magia y potencial de todo lo que fui y soy, para SER como semilla estelar universal.

A todos mis lectores, gracias por compartir vuestro tiempo conmigo.

Os recomiendo la lectura de mi artículo El camino del destino