La claridad que da la muerte

Mientras estaba escribiendo protocolos de sanación para acabar mi curso de Medicina energética, se me cruza un vídeo de Pau Donés (Jarabe de palo) que grabó antes de morir, sabiendo que se moría de cáncer.

Y mientras estoy metida en los problemas de pacientes y su sanación, la letra de esta canción me ilumina. La muerte es un tema que me apasiona, simplemente, porque trae consciencia de la belleza e importancia de vivir…deliciosamente bien.

Cada día debería ser así:

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En mis sesiones sobre la muerte siempre lo digo: hay que vivir en plenitud para morir satisfecho y feliz. Los antiguos egipcios vivían cada día sabiendo que un día se iban a morir y había que estar preparado para el viaje. Shakespeare también le da a la muerte un espacio sagrado en sus tragedias: hay que estar preparado y al final, esta vida es demasiado fugaz como para no disfrutarla y sacar la mejor versión de uno mismo.

Pero nuestra vida no es exactamente así, porque vivimos en un engaño para buscar la felicidad creyendo que es todo lo contrario de lo que realmente es ser feliz. La simplicidad. Siente tu corazón y ahí está la solución.

Estamos tan alejados de la felicidad que necesitamos caer en enfermedad para cambiar esa vida  que generó el conflicto y enfocarnos en la vida que nos llena. La enfermedad no es más que un desequilibrio físico, mental, emocional y espiritual. El cuerpo puede sanar perfectamente cuando hay armonía, paz y coherencia con los sentimientos y anhelo del alma.

La enfermedad te descubre la vida, la belleza del mundo, que el tiempo es oro, las relaciones lo más bonito que existe y estar presente, la clave de la vida. Conclusión: vive tu sueño sagrado, el resto es una mera ilusión del inconsciente colectivo y el sistema que se impone para sacarte la vida.

Ese «hoy me siento bien, deliciosamente bien» me llegó al alma. Porque cada día debería ser así. Es la libertad más absoluta del ser. Estar con quien quieres y haciendo lo que quieres, ver belleza en cada rincón, ser responsable de tus decisiones y cambios.

No se necesita la enfermedad para tomar consciencia de la vida y darse cuenta que perdiste el tiempo en una vida rutinaria o equivocada. La vida se vive apasionadamente, porque se acaba pronto esta aventura!

Escucha esta canción con atención, porque la canta alguien que sabe que no pudo vivir para terminar de vivir lo que no pudo porque se perdió en la fama. En su voz hay un alma que encontró la paz y aceptación, viviendo los últimos días deliciosamente bien con su perro en la naturaleza. Su voz filtra esa luz que te cuenta:vive, cambia lo que no te funciona….. todo es simple, bello, no necesitas más que vivir el anhelo de tu alma y estar en paz contigo mismo.

Tan simple. Y Pau, nos lo dejó cantando lleno de luz. Gracias.

Empecemos el 2022 con este mensaje!

LETRA
Misteriosamente hoy
No echo de menos
Misteriosamente hoy
A nadie espero
Misteriosamente hoy
Todo está en calma
Misteriosamente hoy
Nada me falta
No tengo problemas por resolver
Ni dudas ni espejismos
Me entretengo viendo atardecer
Misteriosamente hoy
No siento culpa
Sorprendentemente hoy
Nada me asusta
Milagrosamente hoy (la vida)
Ya no me pesa
Increíblemente hoy (la vida)
Vale la pena
No tengo conflictos que resolver
Ni dudas, ni espejismos
Me contento viendo amanecer
Todo me parece bien, me siento bien conmigo
Nada tengo por hacer, no tengo líos
Solo tiempo que perder y el corazón tranquilo
Hoy me siento bien, deliciosamente bien.